This is a post in collaboration with: @BevansJoel
Original work: PDF file.
Translation to Spanish: Anselmo Benassi
Translation to Spanish: Anselmo Benassi
Hoping to share @RonRitchhart 10 apps for parents to our ES school community to support, throughout distance learning. Does anyone have a Spanish translation for this resource? #makingthinkingvisible #CreatingCultureofThinking #CCOTonline #coronalearn https://t.co/HFdYSWAEII— Joel Bevans (@BevansJoel) March 24, 2020
- Nombra y reconoce explícitamente la rutina de pensamiento. Al hablar con tu hijo utiliza el lenguaje y vocabulario propios de las rutinas de pensamiento que él o ella usa, así podrás hacerlo más visible, comprensible y evidente para ellos. Esto es especialmente importante al elogiar y ofrecer retroalimentación: “esa es una teoría interesante”. “Me gusta cómo has usado lo que ya sabes para hacer conexiones nuevas”. “Esa es una perspectiva en la que yo no había pensado antes.
- Desarrolla una mentalidad de crecimiento y aprendizaje. La creencia de que la inteligencia y la habilidad crecen y se desarrollan con el tiempo, a diferencia de algo que se fija y se establece, fomenta una mayor capacidad de toma consciente de riesgos, colaboración, disfrute de los desafíos, desarrollo a largo plazo y logros continuos en todo tipo de esfuerzos de aprendizaje ( Dweck, 2006). Desarrollarás una mentalidad de crecimiento en tu hijo o hija al enfocar tus elogios en el proceso, el aprendizaje y el esfuerzo (“Realmente trabajó duro en esto y aprendió mucho” “Hizo un gran trabajo al desarrollar un plan y seguirlo” “Realmente se ha desarrollado como músico”), en oposición a destacar la habilidad (“eres tan inteligente” “Mira lo inteligente que eres”; “lo hiciste tan rápido”. “Eres bueno en matemáticas” “Tienes mucho talento”).
- Desafía pero no rescates. Todos podemos aprender mucho al cometer errores, al salir de nuestra zona de confort y asumir conscientemente riesgos para probar cosas nuevas. Enfrentarse regularmente a desafíos, errores y fracasos crea una mentalidad de crecimiento y desarrolla resiliencia intelectual. Cuando tu hijo o hija encuentre dificultades, no intervengas para resolver el problema por él o ella y rescatarlo del aprieto. En cambio, hazles preguntas que los ayuden a pensar en el problema, identificar y elegir un curso de acción para seguir adelante.
- ¿Qué preguntas te hiciste hoy? Nuestras preguntas nos impulsan como aprendices. Cuando Isidor I. Rabi ganó el Premio Nobel de física, le preguntaron: "¿Por qué te convertiste en científico, en lugar de médico, abogado o empresario, como los otros niños inmigrantes de tu vecindario?" Mi madre me hizo científico sin quererlo. Todas las demás madres judías en Brooklyn le preguntaban a su hijo después de la escuela: '¿Entonces? ¿Aprendiste algo hoy? Pero, no mi madre. Ella siempre me hizo una pregunta diferente. "Izzy", decía ella, "¿hiciste una buena pregunta hoy?" ¡Esa diferencia, hacer buenas preguntas, me hizo convertirme en científico! ''
- Céntrate en el aprendizaje por sobre el trabajo. Es fácil para los padres concentrarse en el trabajo que tiene que hacer su hijo y supervisar la finalización de ese trabajo. Sin embargo, la finalización del trabajo nunca es el objetivo de una tarea. El aprendizaje es el objetivo. Tómate un momento para preguntarle a tu hijo o hija, cuál es el propósito de cada tarea, qué creen que el maestro quiere que aprendan y mejoren. Luego supervise el aprendizaje, no el trabajo.
- Fomenta las conexiones. Los estudiantes encuentran nueva información constantemente. Para aprender y dar sentido a esta información, deben poder conectarla con su conocimiento previo e integrarla con su experiencia y vivencias. Haz preguntas que estimulen la conexión con el conocimiento previo y alienta la creación de metáforas, paralelismos, comparaciones y contrastes cuando hables sobre los temas que tu hijo está estudiando o explorando de forma independiente.
- Apoye a su hijo en la discusión o debate efectivos y persuasivos. Un estudio reciente en la revista Child Development (J. Allen, 2012) evidenció que los adolescentes que discuten y debaten constructivamente con sus padres, al desarrollar un argumento y proporcionar evidencia de su posición sobre un tema, son más capaces de resistir la presión de los compañeros para usar drogas, en comparación con los estudiantes de hogares con formas más autoritarias. Los investigadores encontraron que tales debates en el hogar eran oportunidades de entrenamiento para los adolescentes, que les permiten aprender a hablar, expresar una opinión y usar evidencia para sostener sus posiciones.
- Proporcione tiempo para perseguir pasiones. En la película Race to Nowhere (2010), la productora / directora Vicki Abeles documenta cómo la presión para tener éxito en los exámenes, con demasiada frecuencia está robando a los niños la oportunidad de tener experiencias enriquecedoras de aprendizaje, causando problemas relacionados con el estrés, desmotivando a los estudiantes, interrumpiendo el normal estilo de vida en el hogar y llevando a escala la deshonestidad académica. Un argumento de la película es que los adolescentes necesitan el tiempo y el espacio para perseguir sus pasiones e intereses. Los padres deben asegurarse de que estas pasiones, que pueden convertirse luego en vocaciones, no se eliminen de la vida de sus hijos. Preste atención al aprendizaje y las pasiones de su hijo fuera de la escuela y haga tiempo para ello ocurra.
- Como padre, haz visible tu propia rutina de pensamiento. El psicólogo ruso Lev Vygotsky dijo: "Los niños crecen en el contexto intelectual que los rodea". Tu como padre eres un modelo para su hijo o hija de lo que significa ser un pensador y un aprendiz. Modela tus propios intereses, pasiones, curiosidad, reflexión, aprendizaje y pensamiento para tu hijo o hija. Haz visibles para ellos tus propias rutinas de pensamiento como modelo a seguir.
- ¿Qué te hace decir eso? Esta simple pregunta es la "herramienta por excelencia" para padres y maestros. Simplemente preguntando, "¿Qué te hace decir eso?", después de que alguien ha dado una respuesta, en un tono curioso y sin prejuicios, podemos abrir una ventana al pensamiento detrás de la respuesta inicial de esa persona. Los maestros en Suecia se refirieron a esto como la “pregunta mágica”, debido a cuánto puede revelar sobre el pensamiento de los estudiantes. El razonamiento detrás de la respuesta inicial, a menudo nos dice mucho más que la respuesta misma.